Un pequeño artículo de 31 de octubre de 1948 indica que, en la tarde del día anterior (sábado), en el Cerro de los Sagrados Corazones, el cardenal D. Pedro Segura bendijo la nueva Capilla del Santísimo Cristo del Perdón, oficiando de pontifical su eminencia, asistido por los canónigos Alert y Muñoz de Morales. Se señala, además que, desde el púlpito, el cardenal pronunció “una fervorosa alocución”.
Esta capilla, cuya torre campanario se
muestra simétrica a la de la Parroquia de los Sagrados Corazones, cerrando la
similitud del recinto, aunque a mucha menor escala, con la Plaza de San Pedro o
la sevillana de España, fue concebida por el cardenal Segura, como lugar para
la reconciliación del peregrino que llegara al Recinto Monumental al Sagrado
Corazón de Jesús. Por ello, tenía en sus laterales varios confesionarios que
facilitaran ese momento de encuentro con el Señor, a través del Sacramento.
Ratificando la importancia de este lugar,
fue inicialmente parte de un Monastario de la Visitación, cuya congregación,
denominada Visitandinas o Salesas, tiene por carisma la devoción al Sagrado
Corazón de Jesús. Una idea coherente con la construcción del lugar, para
fomentar y desarrollar toda esta devoción. Y tan partícipe era el cardenal de
todo esto que su capilla ardiente, el 8 de abril de 1957, antes de partir a la
cripta bajo la torre del Monumento, fue esta Capilla del Perdón.
Al poco abandonaron las Salesas estas
instalaciones y, unos años más tarde, alrededor de 1960, comenzaron a
desarrollarse los cursillos de cristiandad, bajo la dirección espiritual
diocesana de D. Publio Escudero. Desde ese año, hasta el presente (exceptuando
el tiempo reciente de su cierre por rehabilitación), este espacio y su entorno
ha estado encomendado al Movimiento de Cursillos de Cristiandad.
Y también me he cuestionado por aquellas
personas (sin rostro conocido para mí, por lo reciente de mi experiencia en el
cursillo de cristiandad, en comparación con las décadas de las que hablo en
este artículo), que se han preocupado de dotar a las instalaciones y de mantener
su utilidad litúrgica: copones, cálices, albas, casullas, cíngulos, manteles,
paños, corporales, purificadores… Tanto que buscarían y cuidarían con esmero,
entrega y servicio. ¿Quiénes fueron? ¿Cómo lo hicieron? ¿Qué les movió? Bueno,
esta última pregunta creo que es obvia.
70 años de la Capilla del Santísimo Cristo
del Perdón, en el día 30 de octubre de 2018. Muchas felicidades a Cristo
presente en este templo, muchas felicidades a quienes la moran en el presente,
a quienes le siguen dando vida y una vida por y para Cristo, encomendándose al
Señor, pidiendo la Gracia del Espíritu Santo y teniendo por modelo de piedad y
ternura a María. Muchas felicidades a los miles de personas que han pasado por
este templo y han aprovechado la experiencia, y a quienes aún la promueven. Que
Dios otorgue mucha luz a todos, para ser aún más parte de su Luz y transmitirla
De Colores.
A esta Capilla se accede, normalmente, a través de las instalaciones del Movimiento de Cursillos de Cristiandad, por la Plaza Nuestra Señora de Loreto. Los lunes laborables celebran la santa misa a las 20:00 h.; el resto de eucaristías son las propias de las actividades programadas en el lugar.